5 errores que no debes repetir este año



Llegó marzo, terminó febrero, enero ya es historia y seguramente lo que el viento se llevó fueron tus resoluciones de año nuevo.

Para este mes ya casi la mayoría tiramos la toalla, “mejor cancelo mi suscripción al gym” “ahora sí fija, al próximo mes comienzo a ahorrar”, “mmm…creo que a fin de año comenzaré a buscar empleo”, etc. y etc. Reajustamos nuestras agendas y lo que sí podemos hacer este año lo dejamos para el próximo.

Bueno esto a tooodas nos sucede. Y aquí no vamos a juzgarnos entre nosotras ¿ok? (Si eres de las capas que ya bajó 2 kilos hasta este mes, te aplaudimos y mientras continúas leyendo te pedimos que  tengas compasión por nosotras las mortales xD)

Me incluyo a mí misma en el club de las mortales. Y he visto que hay 5 errores muy comunes que repetimos cada año. Errores que nos impiden perseverar en aquellas metas que nos propusimos a comienzos de año. Déjame compartirte los errores que encontré:

1. Aceptar a cualquiera en tu vida.


La presión que sentimos en esta época, el famoso FOMO (fear of mising out) o el miedo de perderse de algo, nos presiona publicar selfies grupales en nuestro perfil, para que la gente vea que también somos “sociales” o que nos llevamos bien con todos y no nos perdemos de nada. Pero cuando esto sale fuera de nuestro control empezamos a relacionarnos con gente tóxica que influirá mucho a la hora de tomar decisiones serias. Jim Rohn dijo “Eres el promedio de las 5 personas con las que más te juntas”, piensa ¿con qué tipo de personas frecuentas más? ¿ellas, te están ayudando a alcanzar tus metas o con su pesimismo están enterrando tus sueños?

Sé que es difícil terminar con ciertos tipos de amistades o que en serio da miedo no estar en LA selfie con más likes, pero reflexiona sobre esto: Tú amistad es muy valiosa, no tienes que mendigar amor o estar rogando por la aprobación de la gente. Si te relacionas con las personas correctas alcanzarás más rápido tus metas. Que tus metas ya cumplidas hablen más que tus selfies grupales.

2. Tener altas expectativas


Chequea de nuevo tus resoluciones. Sé realista. Si te propusiste cada mes de este año bajar unos 10 kilos, lamento decirte que tendrás que contratar el mismo entrenador que tienen las Kardashian. Si te pusiste como meta tener novio este año y andas por ahí buscando un amor a primera vista, lamento decirte que eso solo pasa en Disney. Muchas nos frustramos porque hemos sido poco realistas desde el principio o porque todavía no nos conocemos bien como para tener un plan que nos lleve al éxito. Investiga antes cómo lograr aquello que quieres, y luego cómo otras personas alcanzaron esas metas y por último investígate a ti misma, haz todo esto antes de planificar. Todas somos diferentes, cada una tiene su manera. No te compares y trabaja a tu ritmo.

3. Menospreciar lo que ya tienes a tu alrededor


A veces esperamos tener algo para comenzar a hacer algo. O esperamos que alguien aparezca para recién ponernos en acción. Ya no te fijes en lo que te falta, más bien ve lo que gracias a Dios no te falta. Sé creativa, trabaja con lo que ya tienes.

Esto me pasó a mí y aun me está costando entender. Una de mis metas es abrir un canal en YouTube, convertir este blog en un vlog. No tengo una cámara profesional, y créeme la anhelo con todo mi corazón. Pero no por eso voy a poner en pausa este blog ¿no es cierto? Estoy aprendiendo a disfrutar Imillas Únicas como un blog y a no menospreciarla porque todavía no es un vlog. Disfruta de las pequeñeces.  

4. Miedo a meter la pata de nuevo


¿Sabes que es lo más lindo del año? Es que vuelve a comenzar a ser nuevo cada primero de enero. Y eso también es lo lindo de los días y de los meses. ¿Fracasaste ya? Vuelve a intentar. Persevera. Dios es un Dios de segundas y muchas oportunidades. ¡Él mismo dijo que ha hecho todo nuevo! Así es un artista, se permite fracasar, y fracasar demasiado hasta que la obra de arte esta lista.

¿No por el miedo al “qué dirán si me va mal”, vas a esperar hasta el próximo año para cumplir esa meta?

Dios empezó el buen trabajo en ustedes, y estoy seguro de que lo irá perfeccionando hasta el día en que Jesucristo vuelva.
Filipenses 1:6

5. No buscar intimidad con Dios.


No importa si en las redes te ven como la chica antisocial número uno. Hay una sola persona de la que tienes que conseguir 100k likes y que apasionadamente quiere ver tus #goals cumplidos. Gracias a Jesús podemos tener una amistad íntima y única con el Espíritu Santo. Él nos conoce mejor que nadie, conoce muy bien nuestro pasado como nuestro futuro. ¡Wow! Este es un lujo que no podemos dejar pasar cada día (si quieres tener una vida llena de éxitos, obviamente)

Haz tiempo para tu relación con Él. ¿Viste su perfil en la Biblia? Tómate tiempos de meditación con él, o solo camina con él por el centro de La Paz (o la calle, para nuestras lectoras extranjeras) pensando y preguntándole cosas. Que lo que tienen tú y él se convierta en algo más íntimo que solo estar online los domingos en la congre y vistearlo los lunes por la mañana. 

Estoy practicando este ejercicio de caminar con Dios (osea orar o pensar con él mientras yo camino) y a veces se me ocurren preguntas locas como: ¿oye Dios, te gustaría que use algún día ese vestido tan bonito? o ¿esta cebra tan feliz, será creyente? o exclamaciones como ¡qué lindo se vería mi esposo con ese traje!, ¿tendrá cuerpo para eso? ja ja ja. Bueno, ya sabes a lo que me refiero. Haz que tu relación con él sea más personal. Y no solo preguntes, sino dale tiempo para que él responda.

Bye I.U. girls, espero que juntas no volvamos a caer en estos mismos errores, y anhelo que este artículo te haya ayudado a simplificar tu vida.